Introducción  
Todo  acto  situado  en  voluntad  trae  consigo 
desarrollo y  civilización,  mientras  que  los  hechos 
impositivos generan incomodidad a los ciudadanos, 
dejando en consecuencia estancamiento personal y 
limitado  crecimiento  Nacional.  La  omisión  o 
falsedad de las obligaciones tributarias provienen de 
una extensa información fiscal, confusa y con escasa 
divulgación,  por  parte  de  las  autoridades  fiscales, 
dejando una valiosa oportunidad, de llevar a cabo 
este estudio. A corto plazo el grueso poblacional de 
jóvenes serán contribuyentes activos al incorporarse 
en el sector productivo, necesitando información de 
uso  práctico  como  útil,  sobre  las  próximas 
obligaciones  tributarias  en  el  ejercicio  de  su 
profesión.  
Se  requieren  acciones  encaminadas  a  la 
formación  de  valores  a  fin  de  generar  hábitos  de 
compromiso fiscal en cada individuo, donde evadir 
o  quizá  eludir  sean  conductas  rechazadas,  la 
constante de los ciudadanos con el tema de cultura 
contributiva,  es  sentir  una  obligación  impositiva, 
pesada,  compleja  de  comprender,  aún  más  de 
ejecutar.  Mientras  las  autoridades  Fiscales  en 
México  han  dejado  de  lado  el  compromiso  de 
sensibilizar a estos   jóvenes, sobre la generación de 
prosperidad para el desarrollo de una Nación está en 
la colaboración contributiva de los ciudadanos. En 
del programa Nacional de Cultura Contributiva de 
México 2011-2012, “para el sector Universitario se 
propusieron algunas actividades que consistieron en 
conferencias  y  visitas  guiadas  en  las  áreas  de 
asistencia a contribuyentes” (Valls, 2015, p.153). 
Mientras  que  la  Universidad  del  Valle  de 
México  (plantel  San  Rafael)  y  el  sistema  de 
Administración Tributaria, realizaron un convenio 
para fomentar la cultura contributiva, el objetivo es 
“promover  actividades  académicas  mediante 
capacitación, asesoría y orientación en servicios y 
trámites electrónicos”, así fue expuesto en la página 
web  the  Logistics  world,  por  (Juárez,  2019),  por 
último,  afirma (Valls,  2015)  “realiza  una serie  de 
cuadernillos  donde  se  encuentren  herramientas  de 
interés y utilidad que permita a las personas mayor 
acercamiento a la  cultura contributiva” (p.3), para 
que  las  personas  practiquen  de  manera  garante  y 
acertada sus compromisos fiscales. 
Por  lo  tanto,  no  se  observan  herramientas  de 
apoyo en  micro  aprendizaje en el  tema  de  cultura 
contributiva, dentro del estudio realizado se estipulo 
como  objetivo,  favorecer  la  comprensión  de  la 
cultura contributiva a los alumnos de la Universidad 
Politécnica  del  Valle  de  México,  en  la  carrea  en 
Administración y gestión empresarial, por medio de 
un canal en Telegram con micro learning, dentro del 
ciclo  2022-2.    Tratando  de  dar  respuesta  a  la 
pregunta  de  investigación  ¿Cómo  a  partir  de  un 
canal en Telegram por medio de microlearning, se 
puede  favorecer  la  comprensión  de  la  cultura 
contributiva en alumnos de la carrera de Admiración 
y gestión empresarial? 
 
Metodología  
 
El  extenso  fue  enmarcada  bajo  el  método 
Investigación-Acción,  por  “sus  faces  cíclicas  en 
espiral desde la problemática, elaborándose un plan, 
este se implementó y se evalúo”, según (Hernández-
Sampieri et.  al, 2014,  p.7),  desde  una concepción 
paradigmática  socio  crítica  como  afirma  Orozco-
Alvarado (2016) y Arnal-Agustín et al. (1992), “se 
planteó  un  método  fundado  en  la  relación  entre 
teoría  y  práctica,  en  él  se  fomentó  la  indagación 
participativa”  (p.98),  con  enfoque  cualitativo, 
entendido por este, “utilizar la recolección y análisis 
de los datos para afinar las preguntas realizadas o 
revelar  nuevas  interrogantes  en  el  proceso  de 
interpretación”, según (Hernández-Sampieri  et.  al, 
2014, p.10). 
De tipo critico-emancipador-práctico, ya que la 
emancipación  proviene  no  sólo  de  cumplir  las 
funciones  de  diagnóstico  y  producción  de 
conocimiento, sino  que  “crea  conciencia  entre los 
individuos  sobre  sus  circunstancias  sociales  y  la 
necesidad  de  mejorar  su  calidad  de  vida”,  según 
(Muñoz-Arteaga,  et  al.  2011,  p.  24).  Mientras 
Creswell (2005), menciona, “lo practico se centra en 
el  desarrollo  y  aprendizaje  de  los  participantes  e 
implementa  un  plan  de  acción  (para  resolver  el 
problema,  introduciendo  la  mejora  o  generar  un 
cambio”  (p.16).  Con  diseño  colaborativo,  afirma 
(Hernández-Sampieri  et.  al,  2014,  p.7),  los 
participantes  fungieron  como  investigadores 
interactuando de manera constante con los datos del 
planteamiento a la elaboración del reporte y  corte 
transversal. 
El  estudio  fue  llevado  de  forma  estructurada 
con un trato artesanal, es decir, la población, según 
Dieterich  (2001),  entiéndase  como  población  “al 
grupo  o  colectivo  de  personas  que  se  centra  en 
nuestro  interés  de  conocimiento,  estando  definida 
por el conocimiento del investigador” (p.164); en la